El ambiente de trabajo es el entorno en el cual los empleados llevan a cabo sus actividades. Este se encuentra determinado por factores propios de la percepción y características de los trabajadores, pero también por las acciones de la organización. Dependiendo de ello, existen diferentes tipos de clima laboral.

Cabe resaltar que, un buen clima laboral, hace sentir mejor a los colaboradores y crea un sentimiento muy positivo hacia el trabajo (Bizneo, 2021). Entonces, si no se gestiona adecuadamente, podría convertirse en un grave problema organizacional. Por ejemplo, en Perú, es causal de renuncia del 12% de trabajadores. Así lo reveló una encuesta del portal de empleos Bumeran.

Para profundizar más en este concepto, a continuación, te explicamos cuáles son los diferentes tipos de clima laboral, sus principales características y las claves para promover uno sano.

¿Cuáles son los tipos de clima laboral?

Los ambientes de trabajo se clasifican en cuatro tipos: participativo, consultivo, paternalista y autoritario. A continuación, te explicamos el detalle de cada uno de ellos:

1. Participativo

También llamado incluyente, es uno de los tipos de clima laboral que se caracteriza por reconocer y valora la diversidad. No solo de género, sino también de preferencias sexuales, grupos étnicos, culturas, lenguajes, religión, capacidades físicas, etc. Asimismo, reconoce el derecho de los empleados a disentir, pensar distinto y ser diferentes. La principal característica de este ambiente es la inclusión, donde los colaboradores se sienten apreciados por sus cualidades individuales (Olivares, 2022).

2. Consultivo

Otro de los tipos de clima laboral positivos. En este ambiente las relaciones laborales no están determinadas por la jerarquía, nivel, cargo o subordinación. Se valora la experiencia y las propuestas para solucionar los inconvenientes en cualquier instancia. Asimismo, el diálogo es el centro de las relaciones de sus integrantes. Su característica principal es la comunicación en todos los niveles de la organización (Bizneo, 2021).

3. Paternalista

Generalmente, se presenta en empresas demasiado estructuradas. Consiste en una cultura de trabajo restrictiva, con un tipo de liderazgo que controla cada aspecto laboral, sin llegar a ser un ambiente autoritario. Este tipo de clima laboral limita la iniciativa de los trabajadores y la comunicación es muy deficiente. Su principal característica es la supervisión y corrección constante de todas las actividades laborales (Olivares, 2022).

4. Autoritario, uno de los peores tipos de clima laboral

En este ambiente todas las decisiones son a nivel directivo o gerencial, sin tener en cuenta la experiencia u opiniones del resto de los trabajadores. Suele premiarse la subordinación y la obediencia creando un entorno competitivo inadecuado. Asimismo, puede combinar aspectos del tipo de ambiente paternalista.

Sus principales características son (Bizneo, 2021):

  • Estilo de liderazgo autocrático.
  • Estructura organizacional vertical, jerárquica y rígida.
  • Desequilibrio de responsabilidades y tareas entre los niveles altos, medios y el resto de colaboradores.

Claves para crear un clima laboral sano

El éxito de una organización moderna no solo consiste en mantenerse actualizada e implementar modelos de negocio digitales. También debe considerar el bienestar de sus trabajadores como un aspecto fundamental que garantice su existencia. En ese sentido, para fomentar uno de los tipos de clima laboral positivos, existen algunas claves muy útiles al respecto (IEP, 2020):

  • Implementar técnicas de motivación laboral. Para optimizar el rendimiento de los colaboradores.
  • Establecer sistemas de recompensas. Que favorecen y mejoran el ambiente de trabajo.
  • Mantener la transparencia. Ser claros en todas las actividades que realiza la empresa (procesos, horario, reglamentación, etc.) genera confianza.
  • Fomentar la comunicación. Entre todos los niveles de la organización e igualmente el intercambio de información.
  • Promover el respeto. En todos los niveles de la organización.
  • Mantener un feedback con los trabajadores. Optimiza el ambiente de trabajo dentro de la organización.
  • Procurar instalaciones adecuadas. Tomando en cuenta los siguientes aspectos: iluminación, mobiliario, temperatura, ventilación, áreas de descanso, limpieza, etc.
  • Fomentar el estudio y la capacitación. Para que una empresa crezca es necesario el crecimiento profesional de sus colaboradores.

En resumen, los tipos de clima laboral pueden influir en el sentimiento de pertenencia de los empleados hacia la empresa. Y es que, cuando las personas sienten que su trabajo sirve para algo más que generar dinero, su compromiso con la organización aumenta. Por ello, las empresas exitosas se preocupan en cuidar al máximo el entorno laboral de sus colaboradores. De esa forma, no solo retienen el talento interno, sino que pueden lograr sus objetivos de manera conjunta.